jueves, 27 de agosto de 2020

FUTURO

Relatos de los jueves


Su visión repetida siempre, era que moría joven pero ella sentía a su hijo. A sus 20 años, cuando se había comprometido con David, sufrió un accidente de circulación… A los dos días la dieron por muerta, El novio no podía creer, ella le contaba sus visiones y el la creía sin dudarlo. Pidió estar a su lado a solas, entonces sintió que latía su corazón, todos en el hospital se alteraron y después de dos días de pruebas y varios expertos examinando, les dieron la noticia:

1º Son cadáveres a los que les late el corazón, orinan, no se descomponen , son cálidos al tacto, se curan sus heridas, pueden tener fiebre y los más sorprendente, pueden tener bebés.
2º estaba embarazada!! Su madre se desmayó en ese mismo momento, pero David sonrió y sintió alivio.

La alimentaron artificialmente y a los 8 meses le provocaron el parto , fue una niña hermosa y bella como su madre, era un milagro. La noticia fue mundial " la niña milagro" la llamaron. Un día más tarde la abuela de la niña tropezó y cayó por las escaleras del hospital. El destino siempre cobra sus muertos. La madre de la niña sobrevivió 10 años en esas condiciones. Su hija y su padre vivieron felices con el recuerdo de su madre.

                                                                   
 

"Es el destino de los cadáveres que les late el corazón. Estos pacientes están completamente e indiscutiblemente muertos. tienen  órganos funcionales y pulso. Los costos médicos de estos pacientes son astronómicos. Para calificar de cadáver con corazón latente, todo el cerebro debe estar muerto".

¿Podemos tener una visión de futuro, pero se puede cambiar?



*El argumento núm. 12 corresponde a la historia de un personaje que tiene la visión de un futuro inquietante con la posibilidad de cambiarlo

lunes, 24 de agosto de 2020

ÉPOCAS


Estos tiempos, son otros tiempos. ¿Seguro? En algunas cosas parece que haya pasado, no décadas, siglos. Algo tan simple como el reto generacional de hacer el gesto de llamar por teléfono nos puede ayudar. ¿Cómo harías tú el gesto de indicar que vas a llamar por teléfono?            

  Reto viral revela tu edad “¿como haces el gesto para hablar por telefóno?”

Según vemos en la fotografía, un padre realiza esta cuestión a su esposa y a sus hijos adolescentes.
Evidente la respuesta, ¿verdad? Teléfono fijo, auricular y micrófono. Teléfono móvil plano.

Es un cambio de época, distintas señales para decir lo mismo entre nosotros. En los más jóvenes claro, en los mayores  seguimos igual o peor.



Pero qué vamos a pedir si vemos el ejemplo que exportamos al mundo desde nuestras instituciones. Es un país de católicos y puteros como Dios manda. Lo demás..., como decía el torero: "Hay gente pa'toó".
¿Más ejemplos? El tema del rey, las mascarillas, la vuelta al cole y cualquier tema mediático. Como dijo Umberto Eco, con un agravante, "el drama de Internet que ha promovido al tonto del pueblo como el portador de la  verdad, sea famoso o no".




domingo, 9 de agosto de 2020

PLANES


Escuché ruidos y bronca en el piso de abajo, solo podía ser mi vecinita y alguna de sus extrañas movidas.
Toqué a su puerta y ella abrió, con poca ropa.

-¿ Todo bien? -pegunté. Ella solo lloriqueaba sin decir nada.

Al fin salió un joven mal humorado y pidiéndome explicaciones. Después de unas pocas palabras, le invité a recoger sus cosas y a marcharse mientras seguía increpando. Le advertí por última vez. Ella no dijo nada. Parecía un pajarillo entelerido bajo la lluvia.
El bravucón salió diciendo que le habíamos jodido el plan entre los dos y que mi vecinita no era más que a una puta loca. Me aseguré de que llegaba a la calle. Al llegar al portal, sin decir nada, le emboqué un puñetazo lleno de rabia. Al volverse, le metí un codazo en la boca del estómago que le hizo caer al suelo.  -¡Ni se te ocurra volver por aquí! -le espeté.

Regresé al piso e intenté calmarla. Nos sentamos en su sofá, Sé que es una chica mal hablada, irreverente y rebelde, pero no puedo soportar ese tipo de actitudes por parte de nadie. Creo en su buen corazón. Sin embargo, verla de repente apoquinada me sorprendió porque ella no es de amedrentarse o de no sacar su mala leche a pasear.
Se acurrucó sobre mis piernas. Sus lloriqueos se volvieron mimos. Sus brazos se hicieron a mi cuello y su cara se acomodó en el hueco con el hombro.

- Noto algo duro por tu bolsillo -me ronroneó.
- Es mi móvil -contesté, intentando guardar la compostura.

Aquel pequeño pajarito que parecía indefenso se estaba convirtiendo en una gata mimosa.
Notaba sus labios entre abiertos sobre mi cuello y su cuerpo se adaptaba entre mis piernas. Ahora, o estaba ya perdido con mis demonios en baile, tenía que salir de sus dominios tan tentadores. Lo sentía como territorio apache.

- Vamos, ponte algo de ropa y te invito a  cenar a mi casa.
- ¿Comida china? -preguntó no sin cierta sorna.
- No -respondí tajante pero carente de rudeza-. Me apetece comida de casa, ensalada y carne a la plancha. Tengo vino y algún refresco.
                                                                     

Ignoré su sonrisa traviesa. Al fin se encaminó a su habitación, contoneándose y acomodando sus braguitas plegadas por el roce, entre aquellas nalgas menudas pero llenas de peligro. Mi cuerpo no quería que se retirará pero a mis ojos les encantaba ver cómo lo hacía. Y en ellos, mis demonios hablándome al oído.

Me dejaba ver mordiendo mi labio inferior, sin confesar que el dolor de mis dedos era horrible. Los huesos son muy duros.  Me adelanté para ponerlos un poco en hielo.
No tenía planes ni pensaba hacerlos, recordando al joven y sus palabras, pero ya dijo un famoso boxeador:  "Todo el mundo tiene un plan hasta que le dan su primera hostia".