viernes, 19 de junio de 2020

LA SOMBRA DEL VIENTO


Ayer pretendía colocar en este blog uno de mis libros favoritos. Cuando hoy, un día después, nos hemos despertado con la muerte de su autor a los 55 años en Los Ángeles.
Tengo que decir que mi corazón esta encogido y como decía Sempere, uno de sus maravillosos personajes: "Cada libro contiene el alma de quien lo escribió y también de quienes lo leyeron y soñaron con ellos".

                                                                             

Como curiosidad decir que este libro está traducido a 40 idiomas, es uno de los casos extraños que al final lo leen quienes no tienen ese hábito. El libro español más vendido después de "El Quijote".

Me enganché a este escritor hace muchos años cuando cayo en mis manos "Marina" una novela casi para adolescentes, que no me canso de recomendar a jóvenes de mi entorno.

Le siguió toda la saga, hasta decir que los Sempere forman parte real casi, de nuestras familias. Nunca sabré agradeceré tantas charlas en las comidas, cenas, en terrazas intercambiando finales y detalles, que cada cual los entendía de diferente manera, porque son libros vivos. Podíamos estar en una terraza mucho tiempo y atraer la atención de los más cercanos con nuestras charlas emocionadas de los personajes. Me reconozco un fan de su literatura y de él.

Siempre será un placer leerte. DEP





La sombra del viento (2001) corresponde al primer libro de la saga de "El cementerio de los libros olvidados". Es la primera entrega de un ciclo de cuatro novelas interconectadas y ambientadas en una Barcelona misteriosa y gótica que va desde la era de la revolución industrial hasta los años posteriores a la guerra civil española. Los cuatro relatos, independientes y autosuficientes en sí mismos, comparten algunos personajes y escenarios.
Sus secuelas son El juego del ángel (2008), El prisionero del cielo (2011) y El laberinto de los espíritus. (Wp)

Sus personajes son especiales y compuestos de muchísimas capas lo que hace que cada uno tenga una forma muy particular y pisen con huella propia, entonan su voz y proclamen su visión del mundo.