miércoles, 26 de enero de 2022

ESCAPE

Relatos de los jueves


Conseguimos dar con la tecla y ponerle el morbo necesario a nuestra vida. Al principio ella se sentía extraña, pero poco a poco ha logrado disfrutar incluso más que yo.
Empezamos jugando con conocidos en sitios privados, en nuestro propio apartamento con alguna visita inesperada o provocada, Somos cómplices y leales en todo lo que hacemos y después disfrutamos de sesiones de sexo dominante y duro, colmándonos de amor y besos al final. 
Aceptamos lo que cada uno propone realizar. Mi último regalo fue un juguete con control remoto, Para practicar encontramos un café a las afueras, cerca del puerto, donde usé la intensidad necesaria para provocar acontecimientos prohibidos y momentos sin censura con algún extraño para desatar el lado salvaje del macho.


La vida es monótona sin aventuras, cierto es que hay algún riesgo, pero de esta vida no saldrá nadie vivo.
Siempre estamos en contacto visual o con altavoz para escucharnos, por supuesto tenemos una palabra de escape  por si las cosas se complican. Como supongo tienen todos los que disfrutan jugando.
Es una expresión corta, puede ser incluso una exclamación que nunca dejará pistas.
¿Ideas para tener recambios?.



jueves, 13 de enero de 2022

LA CITA

Relatos de los jueves


Era mi primera cita a ciegas. Estaba nervioso. Para no parecer demasiado exigente, había pedido unas características generales. Ella había elegido el restaurante y la agencia tramitó la reserva. Obviamente, no puse objeción alguna. Internamente, reconozco que alguna fantasía tenía. Eso de no vernos hasta ese momento le ponía morbo y cierto riesgo: ¡Ojalá sea rubia!, ¡ojalá, sexy! y esas cosas.
 
Tuve dudas con la ropa, al final decidí vestir como siempre: a mí aire pero arreglado. Y con gafas para leer todo en condiciones. Perdía algo de glamour pero lo prefería así. Es más fácil ir a mejor. 

Me indicaron la mesa cuando llegué y a los cinco minutos me levanté a la barra y pedí un crianza fresquito. La camarera me afeó pedirlo frío. Sonreí, pero no le rebatí. Miraba a todos los lados intentando intuir a mi cita. Nada. Al rato volví a sentarme porque me sentía demasiado observado en la barra.

-Ya lo siento. Ahora mismo le atiendo -se disculpó una camarera.
- No se preocupe, estoy esperando.


Unos minutos después se sentó delante de mí, con los labios pintados y el pelo recogido, sin uniforme de trabajo. Me explicó que una compañera tuvo una urgencia con un hijo y le echó una mano haciendo su turno también. 

No me dio tiempo a fijarme más allá de su pelo y su sonrisa. Estaba nerviosa, pero era natural y espontánea, divertida, tenía conversación. Me dí cuenta de la atención y complicidad de todos los compañeros y un buen corazón al sacrificarse un poco por uno de ellos. Cosas que no se desean, pero que son relevantes en la vida. Por supuesto me encantó la cita. Sus besos, su olor y notar su temblor cuando la abracé me conquistó.
Ojalá hubiera sido antes.

lunes, 3 de enero de 2022

I LIKE IT


Me gusta su descaro y el contraste de su imagen dura con su voz dulce.
Me gusta como muerde mi labio y su sabor a licor.
Me gustan sus labios rojos y el color de sus uñas.
Me gusta cuando es salvaje y cuando se vuelve pequeña.
Me gustan sus vaqueros rotos y sus tacones al caminar.
Y no me gusta cuando se marcha de mi lado.
Pero me encanta ver cómo lo hace.