Relatos de los jueves
Conseguimos dar con la tecla y ponerle el morbo necesario a nuestra vida. Al principio ella se sentía extraña, pero poco a poco ha logrado disfrutar incluso más que yo.
Empezamos jugando con conocidos en sitios privados, en nuestro propio apartamento con alguna visita inesperada o provocada, Somos cómplices y leales en todo lo que hacemos y después disfrutamos de sesiones de sexo dominante y duro, colmándonos de amor y besos al final.
Aceptamos lo que cada uno propone realizar.
Mi último regalo fue un juguete con control remoto, Para practicar encontramos un café a las afueras, cerca del puerto, donde usé la intensidad necesaria para provocar acontecimientos prohibidos y momentos sin censura con algún extraño para desatar el lado salvaje del macho.
La vida es monótona sin aventuras, cierto es que hay algún riesgo, pero de esta vida no saldrá nadie vivo.
Siempre estamos en contacto visual o con altavoz para escucharnos, por supuesto tenemos una palabra de escape por si las cosas se complican. Como supongo tienen todos los que disfrutan jugando.
Es una expresión corta, puede ser incluso una exclamación que nunca dejará pistas.
¿Ideas para tener recambios?.